El desayuno es la comida más importante del día. Muchos estudios han demostrado que las personas que desayunan son más productivas, realizan sus labores con mayor eficiencia, mejoran su estado nutricional y mantienen el peso dentro de los límites saludables en mayor medida que quienes omiten esta ración.
No desayunar, deteriora la memoria y la actividad mental ya que el cerebro toma la energía de la glucosa y cuando las reservas de ésta bajan, nuestro cuerpo empieza a quemar otras reservas energéticas (que causa múltiples alteraciones en el normal funcionamiento orgánico).
Un buen desayuno no es simplemente tomar una taza de café, unas galletas o un zumo. Saltarse el desayuno trae consigo decaimiento, falta de concentración y mal humor debido al déficit de glucosa que acabamos de citar, pues a primera hora de la mañana el organismo lleva entre 8 y 10 horas sin recibir ningún alimento.
Algunas personas pueden pensar que si no desayunan no engordarán tanto...pues no. Las calorías que consumimos en las primeras horas el día tienen pocas probabilidades de convertirse en kilos de más. El desayuno debe aportar la tercera o cuarta parte de la cantidad necesaria de proteínas del día, además de carbohidratos ricos en fibra y una pequeña cantidad de grasa.
Este vídeo nos explica cómo desayunar adecuadamente y por qué:
Otra curiosa consecuencia de ésto es que estas personas suelen tener más ganas de ingerir alimentos grasos y ricos en calorías (demostrado con el uso de escáneres cerebrales) además de que este ayuno matutino les hace comer luego más durante el almuerzo. Según los científicos, este hallazgo muestra el desafío que representa tratas de perder peso, ya que dejar de comer hace más atractivos a los alimentos calóricos.
En otras palabras, no desayunar hace que nos entre hambre de comida basura.
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